Se llama ‘nómadas digitales’ a aquellos profesionales que trabajan desde la distancia y a través de internet y las redes sociales. No tienen una oficina fija, son autónomos y prestan sus servicios a las empresas que los contratan desde cualquier lugar del mundo.
Muchos de ellos van continuamente de un lugar a otro del planeta, según la época del año y sin aposentarse en ningún punto concreto. Eligen lugares emblemáticos donde, además de trabajar, pueden disfrutar del paisaje, la gastronomía, la cultura, la historia y las tradiciones propias de cada enclave, ya sea la Patagonia austral, los fiordos de Noruega, las islas griegas o las playas del Índico. Unas experiencias que luego comparten con sus miles de seguidores.
El Ajuntament de Palma, en Junta de Gobierno, ha solicitado por unanimidad al Govern balear que subvencione con un millón y 400 mil euros del Impuesto del Turismo Sostenible un programa destinado a atraer en invierno a estos ‘nómadas digitales’ a la Playa de Palma.
El objetivo es que, a través de la presencia muy activa y destacada de los ‘nómadas digitales’ en las principales redes sociales del planeta, se extienda que la Playa de Palma sigue siendo atractiva en los meses más alejados del sol y playa, aunque la mayoría de la oferta complementaria esté cerrada y los hoteles hibernando.
Pese a estas explicaciones, esta propuesta -recordemos: aprobada por unanimidad por la Junta de Gobierno de Palma en la que están sentados y presentes los tres partidos del Pacte- no ha gustado a dos de ellos.
MÉS per Mallorca y Unidas Podemos se han desmarcado inmediatamente de esta iniciativa. Eso sí, poco después de votar a favor de ella. Y lo han hecho tras escuchar las explicaciones del portavoz Jarabo, que pertenece a Unidas Podemos.
Según alegan los ecosoberanistas y los morados, votaron a favor de los ‘nómadas digitales’ sin percatarse de lo que realmente significaba su apoyo, que ahora califican de “simple promoción turística”.
Lo que no han explicado, por ahora, los regidores de MÉS per Mallorca y de Unidas-Podemos es como es posible que voten en la Junta de Gobierno municipal a favor de una propuesta presuntamente consensuada para, pocos minutos después, desmarcarse completamente.
El Pacte en el Consell de Mallorca sigue con la herida política sin cerrar de los 1’8 millones del Visit Mallorca Estadi. Y ahora se ha abierto otra: la de los 1’4 millones de los ´nómadas digitales’ en el Ajuntament de Palma.
Como causa de ambas: la promoción de Mallorca y las diferentes interpretaciones del modelo turístico que enfrenta al PSIB frente a MÉS per Mallorca y Unidas Podemos. Unas discrepancias que ahora, a menos de un año de las elecciones, interesa a algunos poner en evidencia… aunque eso signifique votar a favor de una iniciativa y, pocos minutos después, desdecirse y recular.