El rey, quien pasa unos días de relativo descanso en el Palacio de Marivent, ha llegado a la base naval de Porto Pí pasadas las 11 de la mañana, donde le esperaba el equipo del velero de la Armada para una primera salida.
A lo largo de las próximas horas, el rey y su equipo navegarán por la bahía a modo de entrenamiento y para realizar las mediciones necesarias para la competición, que comienza el próximo lunes.
En esta edición compiten 111 equipos de 20 nacionalidades y diversas categorías que a lo largo de los próximos seis días disputarán varias regatas en aguas de la bahía de Palma.
El rey aprovecha así unos días de descanso en la isla para practicar uno de sus deportes favoritos.
Todos los barcos participantes en la Copa del Rey-Mapfre deben estar, por reglamento, atracados en el Club Náutico de Palma este domingo por la tarde, que será cuando la organización presente un libro conmemorativo de los 40 años de la regata.
A lo largo de la próxima semana, don Felipe compaginará sus tareas institucionales con visitas culturales y citas deportivas.
Así, el lunes está previsto que participe en la primera regata de la competición y por la tarde acuda junto con la reina Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía a visitar la Cartuja de Valldemossa.
Mientras que el martes, será un día de citas institucionales con el tradicional despacho con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la previsible toma de posesión del nuevo Fiscal General del Estado.