En las últimas cuatro semanas, los precios que pagamos en nuestra comunidad por las gasolinas han ido, poco a poco, bajando desde el récord de hasta 2 euros y 30 céntimos por litro del 23 de julio al euro con 90 y pico céntimos de ahora.
Eso sí, pese a ello, sigue siendo mucho más cara que hace solo un año. De hecho, ahora la pagamos un 33 por ciento por encima del precio de hace doce meses, que era de 1 euro y 48 céntimos por la gasolina de 95 octanos y 1 euros y 35 euros por el gasoil.
La subvención del Gobierno de 20 céntimos por litro que se aplica tras el repostaje ha contribuido a bajar el precio de estos combustibles por debajo de los 2 euros, aunque la subida provocada por la incertidumbre mundial se ha ‘comido’, de facto, parte de este descuento.
Recordar que la mitad del precio de las gasolinas son impuestos y que los empresarios que la venden se quedan solamente 10 céntimos por litro de lo que pagamos los consumidores, con lo que tienen que cubrir salarios, la amortización y renovación de las instalaciones y los gastos generales de su negocio.
Esta bajada de los precios ha coincidido con otra paralela del petróleo, que ha estado estas pasadas semanas a 100 euros el barril, aunque ahora ha vuelto a subir y se está pagando a 120 euros el barril, lo que pronostica otra subida de las gasolinas.