Fuster ha asegurado a sus allegados que no incumplió la normativa en ningún momento del proceso selectivo, pero que prefiere dar un paso atrás para no dañar la imagen del servicio de salud de nuestra comunidad. Está previsto que este mismo lunes de reúna con el equipo directivo del IbSalut ante el que ofrecerá su versión de los hechos.
La Justicia da la razón a uno de los aspirantes, cuyo examen no fue calificado y que, cuando recurrió, se encontró con que sus alegaciones fueron desestimadas por el propio Fuster, quien tenía la obligación legal de abstenerse.
El demandante y la hija de Juli Fuster se presentaron a un concurso oposición para cubrir plazas vacantes de facultativo especialista del área de anestesia y reanimación en el sector sanitario de Ponent de Mallorca en el año 2019.