Los funcionarios y empleados públicos están, una vez más, de suerte y tendrán, otra vez, privilegios que no están al alcance del resto de los trabajadores de las empresas privadas.
Al caer los días 24 y 31 de diciembre de este 2022 en sábado, el Ministerio de Función Pública, liderado por María Jesús Montero, ha decidido darles a estos empleados del Estado dos días de permiso más que al resto de los españoles.
Recordar que el sábado no es festivo laboral y que, por tanto, no hay ninguna ley ni decreto ni orden ministerial que señale que debe recuperarse en otra fecha. Una norma que este año se ha cambiado para favorecer solo a una parte de los trabajadores.
Además, y por si este privilegio no fuera poco, los días libres alternativos al 24 y 31 de diciembre podrán ser seleccionados por los trabajadores públicos en las fechas que ellos quieran, sin ningún tipo de cortapisa ni impedimento por parte de sus superiores, excepto en casos de fuerza mayor o cumplimiento del servicio.
Tanto es así que la propia resolución ministerial que concede esta prebenda a los funcionarios destaca que los dos días de vacaciones extra se pueden añadir a las vacaciones o a las otras jornadas que ya disfrutan sin justificar para asuntos personales.