Karina, además de trabajar en una popular cafetería de Santa Catalina, es vecina del barrio. Una voz autorizada para hablar de la polémica que se vive en la zona cada vez que se acerca el fin de semana. "A partir del jueves es imposible poder dormir", lamenta.
Una realidad que ya han denunciado diferentes asociaciones de vecinos de la zona y ante la que el Ayuntamiento ha intentado dar respuesta incluyendo a Santa Catalina en el listado de zonas turísticas especiales, reforzando así la presencia policial. Una presencia que de momento, tal y como lamentan los vecinos, no está dando los resultados esperados.
"Al contrario. Al menos yo, que vivo por aquí, lo noto peor. Con más ruido, más desorden", explica Karina, quien nos cuenta que "lamentablemente el otro día salí al balcón para por favor pedir a un grupo que se callaran".
Karina se confiesa una enamorada del barrio donde tiene la fortuna de vivir y trabajar. Pero, lógicamente, también exige su derecho a poder descansar sin tener que preguntarse en qué día de la semana se encuentra. "Me encanta la zona, me encanta el turismo, me encanta que la juventud se divierta..., pero lo que también tienen que respetar es que si ellos salen a las cuatro de la mañana de un viernes hay gente que se tiene que levantar a las seis para ir a trabajar el sábado", explica la propia Karina.
A falta de poco menos de un mes para el inicio del verano, la situación en Santa Catalina parece estar lejos de una solución inmediata.