Desde principio de año se han producido más de una docena de incendios sólo en la capital balear, siendo la mayoría de ellos intencionados.
En este pasado fin de semana la imagen se ha vuelto a repetir y los bomberos han tenido que sofocar las llamas de cuatro incendios distintos en las barriadas de Son Rapinya, La Soledad, Can Capes y El Terreno dejando calcinados 17 vehículos, algunos de ellos abandonados en las vías y aparcamientos municipales.
Los fuegos más graves producidos en estos últimos días han tenido lugar en El Terreno y Can Capes. En el aparcamiento de la calle Dos de mayo se quemaron hasta 15 coches, ocho de ellos totalmente carbonizados en la madrugada del sábado. La policía encontró pistas de un fuego provocado.
La batería de fuegos arrancó el viernes por la noche, cuando un indigente que vivía en uno coche abandonado generó un incendio accidental al estar cocinando en un horno pequeño.
En la madrugada del sábado, en Son Rapinya se produjo otro incendio que se habría originado por accidente con la batería de un patinete que se encontraba en el interior del vehículo. Mientras que durante la tarde del domingo, se registró el segundo foco más grave y, posiblemente intencionado según la policía, en la zona de Can Capes, donde se ubican varios coches abandonados.
Ante esta avalancha de incendios en las calles de Palma, la Policia Nacional ha reforzado la vigilancia y avanza a buen ritmo con las últimas investigaciones para tratar de hacerse con los pirómanos.