Hace casi veintisiete años, en 1995, una bonita familia que hace honor al nombre del hotel inició su proyecto con el objetivo de dar la bienvenida a todos los que visitasen la zona.
Desde hace años cuentan con su propio supermercado, colindante al hotel, cuyo fin es garantizar todos los productos que puedan necesitar sus clientes. Así mismo, frente a la puerta principal del hotel nos encontramos con el Fitness Amorós, un gimnasio exclusivo que da servicio a huéspedes y residentes en la zona.
Hoy en día, con un alto porcentaje de clientes repetidores, siguen apostando por sorprenderles cada año, mejorando su servicio y sus instalaciones.
Aunque es cierto que los dos últimos años no han sido nada fáciles para la mayoría de las empresas de la isla, ellos -lejos de dejarse llevar por el pesimismo que invadió su sector- se pudieron manos a la obra para mejorar su hotel y poder dar la bienvenida a turistas y residentes de cara a la próxima temporada.
Además de diferentes reformas en el interior y mejora de las habitaciones, el Hotel Amorós ha ampliado su terraza exterior incorporando una nueva zona de hamacas y camas balinesas, donde los huéspedes pueden relajarse en un ambiente realmente confortable.
Por otra parte, para los meses en los que aún no hace tanto calor y con el objetivo de dar el mejor servicio durante el mayor tiempo posible, han añadido otra nueva zona, junto a las camas balinesas, con una piscina climatizada, donde se puede disfrutar de un espacio lleno de intimidad y calidez.
En los últimos tiempos, muchos han sido los residentes que han conocido el Hotel Amorós, tras organizar una visita para pasar unos días en la zona de Cala Rajada, tan famosa por su puerto, sus playas y su gastronomía. De hecho, Hotel Amorós siempre participa en una de las ferias más famosas de Cala Rajada: La Fira de la Llampuga para ofrecer sus mejores recetas, elaboradas con este pescado tan típico de la zona.
Los próximos objetivos de la propiedad del hotel siguen siendo mantener su excelente servicio y atención al cliente y una mejora constante de sus instalaciones. Ellos, como muchas empresas del sector, esperan que 2022 traiga una muy buena temporada turística y, sobre todo, que vuelvan los clientes que llevan visitándoles más de veinte años.