Cada español que trabaja en el sector privado desembolsa, de media, 19.110 euros al año para sostener las prestaciones sociales y los salarios de los empleados públicos, según los cálculos del Instituto de Estudios Económicos de la CEOE. Dividida por 12 meses, esa cifra se convierte en 1.600 euros cada 30 días.
Las últimas estadísticas completas señalan que en España viven del Estado casi 4 millones de empleados públicos, 9 millones de pensionistas y 3 millones de parados, y todos ellos -16 millones- cobran de los impuestos que pagamos todos los ciudadanos.
Cada trabajador del sector privado sostiene a 1,3 personas que viven de los fondos públicos.
De hecho, las pensiones suponen ya el 20 por ciento del Producto Interior Bruto de España, con una cifra próxima a los 20.000 millones de euros que surgen de los impuestos. Una cifra que este año aumentará aún más ya que la paga de los pensionistas está ligada al Índice de Precios al Consumo, que en estos momentos está en cifras récord por el aumento de los combustibles, la energía y el gas y su repercusión en el resto de la cadena productiva.