Los hechos tuvieron lugar es lunes, sobre las 18:30 horas y en el centro de Palma. Una llamada avisó en ese momento a la Sala del 091 del intento de secuestro de una menor en plena vía pública.
Al llegar al lugar de los hechos, los agentes se entrevistaron con dos chicas que presenciaron lo acontecido y aseguraban que la víctima iba sola por la calle cuando el hombre se le acercó, le rodeó con el brazo y le preguntó adónde iba sola, a la vez que le advertía del peligro que corría con su vestimenta.
Se acercaron a la niña, visiblemente nerviosa, y -ante la actitud lasciva del hombre- quisieron ahuyentarle diciendo que la conocían y que no se iría con ella. Se la llevaron a un bar y ahí permanecieron un rato. Sin embargo, el hombre les esperaba fuera.
Entonces decidieron acompañarla hasta su casa y, al regresar, el varón permanecía expectante delante del local.
Al llegar los agentes, el hombre les explicó que había mantenido "un rifirrafe" con dos chicas y una niña pequeña y reconoció que había visto a la niña "vestida de forma inapropiada" y que se la quería llevar consigo, por lo que le había pasado el brazo por encima.
Los agentes consiguieron contactar con la menor y su madre, corroborando todo lo manifestado por las dos chicas que presenciaron los hechos, por lo que le detuvieron por un delito de corrupción de menores y una tentativa de detención ilegal a una mneor de edad.
La UFAM de la Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación y ha descubierto que, momentos antes del suceso, se había producido otro episodio inquietante con el mismo hombre como protagonista. En esa ocasión fue una joven la que se tuvo que refugiar en un gimnasio por la presunta persecución de este individuo.
Fuentes policiales indican que la investigación continúa abierta e indagan si existen más víctimas.