Esta información se basa en documentos escritos del propio Ladaria a los que ha tenido acceso Domani. De hecho, el protocolo ordenado por el sacerdote de Manacor señala que, si un religioso participaba en un abuso, la respuesta era cambiarlo de destino pero no denunciarlo. Esas instrucciones tenían el sello de la Congregación para la Doctrina de la Fe, firmado por Ladaria en 2015 y siendo su superior en la Santa Sede el cardenal Ratzinger, después, Benedicto XVI, informa el corresponsal de la Cadena SER en Roma, Joan Solés.
En este documento, Ladaria indica por escrito cómo proceder contra el cura francés Bernard Preynat, depravado sexual de menores en campamentos de boy scout: evitar el escándalo público y, también, evitar que el acusado contacte con menores.
El cardenal mallorquín Ladaria, ascendido tiemo después a Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (tercero en la cúpula de El Vaticano) por el papa Francisco, no ordena ni sugiere denuncia alguna ante los tribunales de justicia franceses.
"El sistema del silencio", titula este viernes el diario italiano Domani, que reproduce los documentos.
Las mismas instrucciones ordenó Ladaria cuando fue consultado sobre cómo proceder con otro cura italiano que violó a diez menores: evitar el escándalo en primer lugar, evitar que contacte con menores y evitar, con ello, que sea denunciado.
El cardenal de Manacor no consiguió su propósito y las víctimas denunciaron a sus agresores. El cura francés fue condenado a 5 años de reclusión y el italiano a 20, por la justicia civil, no por la eclesiástica.
