Los artesanos del mercadillo de Navidad de la Plaça del Mercat han sido los últimos en sufrir de madrugada el asalto de varios de sus locales. Un hecho que ya se había producido anteriormente en la Plaça Espanya y que ha generado cierta sensación de inseguridad y miedo entre los comerciantes.
"Gracias a Dios no me llegaron a entrar", reconoce la bordadora Mayte Cerdà, "pero la sensación de inseguridad está. Lo único que buscan es dinero, no se llevaron género porque, ¿qué se van a llevar de un artesano? De día no tenemos miedo, pero sí que tenemos miedo de lo que nos podemos encontrar a la mañana siguiente. Yo no me voy tranquila por la noche".
Además de sufrir estos actos vandálicos, los artesanos de la Plaça del Mercat también denuncian la falta de interés por parte del Ayuntamiento por dinamizar la zona. "Hemos pedido al Ayuntamiento a ver si podían poner luces o animación. Su respuesta es que tomarán nota para el año que viene, que ahora ya es muy tarde. Nos han dicho que no nos podemos quejar, que como por el tema COVID no nos han cobrado...", ha señalado la propia Cerdà.
Así, más allá de la aparente falta de voluntad por mejorar la imagen de la plaza en estos días de fiesta, lo que más lamentan los comerciantes es la sensación de abandono que han percibido por parte de la administración municipal.
Mayte Cerdà asegura que "hasta se olvidaron de nosotros en el tema de los extintores. A los quince días de repartir los extintores por todas las otras casetas yo pregunté si a nosotros no nos tenían que traer también. Se habían olvidado literalmente de nosotros".
Todavía quedan días por delante para revertir una situación, que de momento, no está siendo tan positiva como los comerciantes esperaban en un primer momento
