Noche de truenos, rayos y tormenta. Y también temporal marítimo.
La borrasca Blas, que ha quedado bloqueada sobre el Mediterráneo Occidental por dos anticiclones situados sobre las penínsulas Ibérica e Itálica, ha dejado caer, por tercer día consecutivo, fuertes lluvias sobre Baleares.
Los datos aportados por la Agencia Estatal de Meteorología indican que en la noche de este martes al miércoles, 114 litros de lluvia cayeron sobre Son Torrella de Escorca, en Mallorca. También fue notable la afectación en Lluc, en plena Serra de Tramuntana: 97 litros por metro cuadrado y 90 en la Serra de Alfàbia.
Estas intensas precipitaciones en las zonas altas de la montaña también tuvieron su protagonismo en las poblaciones de su entorno. De hecho, en el Port de Sóller se recogieron 40 litros por metro cuadrado en poco más de una hora y Fornalutx surcó las redes sociales por la intensa tormenta que a última hora de la tarde de ayer disparó las llamadas telefónicas a los servicios de emergencia.
Ya en otras zonas de Baleares, las lluvias también han sido destacables, como los casi 35 litros de agua recogidos por metro cuadrado en Sineu.
Estas precipitaciones no han sido las únicas afectaciones de la borrasca Blas, que hoy sigue encima de nosotros. Los fuertes vientos convectivos mantienen aislada la isla de Menorca, que hace ya cinco días que no recibe suministros ni desde Mallorca ni de la Península.
De hecho, se han registrado en algunos momentos olas de hasta 12 metros en la variante norte-noreste de Baleares provocadas por vientos constantes de casi 60 quilómetros a la hora, registrados en el aeropuerto de Menorca, y rachas de hasta 93 quilómetros a la hora reseñadas en las cimas de la Serra más próximas a Bunyola, 85 en es Mercadal menorquín y 82 kilómetros a la hora en Banyalbufar y Sóller.
Entre los incidentes provocados por Blas, el colegio de Fornalutx se ha visto obligado a evacuar a sus alumnos tras las fuertes lluvias registradas este miércoles. Fuentes del Ayuntamiento han explicado a Europa Press que, aunque "había pasado otras veces, esta vez ha caído mucha agua en poco tiempo". Por este motivo, el personal docente del centro ha optado por llamar a los familiares para que los alumnos volvieran a casa.
La gran acumulación de agua se ha producido a causa de un atasco en el interior de un torrente, que ha provocado que se desvíe a la zona donde está ubicada la escuela. No obstante, el agua no ha llegado a entrar en el interior del edificio y sólo ha alcanzado el exterior del colegio y el polígono. Con todo, mañana se retomarán las clases.