La decisión no ha sentado nada bien a los restauradores, que lamentan que el Ayuntamiento de Palma no haya alargado el plazo al menos hasta finales de año y advierten que la pérdida de este espacio extra les supone importantes pérdidas económicas.
"En nuestro caso, sin terrazas son dos contratos menos. Si antes éramos 6, ahora somos cuatro porque las ventas no son las mismas", advierte uno de los camareros del Vicenta Café de Palma. Por su parte, la camarera de Naau Croissanteria afirma que "nosotros que no tenemos terraza pues la verdad es que nos iba muy bien esta terracita, sobre todo para esa gente que aún teme al COVID".
Diversidad de opiniones entre los vecinos de Palma. Los hay que lamentan que se quite este espacio que da vida a los barrios y da un respiro a los restauradores, mientras que otros aplauden la decisión de Cort y celebran que puedan recuperarse centenares de plazas de aparcamiento.
Así, hay quien opina que "antes de quitar las terrazas, el Ayuntamiento de Palma debería haber hecho una consulta a los interesados". Por otro lado, hay vecinos que aseguran que "si no es necesario, no tienen que alargarse", mientras que otro afirma que "me parece muy bien que las quiten, así hay más aparcamientos".
Desde el Ayuntamiento de Palma ya han dejado claro que no habrá prórrogas. Así que todo aquel que no haya retirado la terraza se enfrentará a sanciones económicas que oscilan entre los 750 y los 1.500 euros.
