Según ha explicado Cort este lunes en un comunicado, entre el viernes y el sábado se llevaron a cabo controles en los polígonos y se neutralizaron "con éxito" varios macrobotellones en Playa de Palma y otros puntos estratégicos de la ciudad, como son Paseo Marítimo, Santa Catalina, Sant Magí, Sa Feixina, plaza Gomila, na Burguesa y los alrededores del cementerio de Génova.
Además, durante los días 27 y 28 de agosto se controlaron un total de 104 vehículos y se procedió a la identificación de 55 personas.
También se levantaron 114 actas por diferentes motivos, de las cuales ocho fueron por tenencia de estupefacientes y cuatro por controles de alcoholemia --tres administrativas y una de carácter judicial--, y se cursaron 35 denuncias de tráfico.
Fuera de este dispositivo, los agentes han atendido este fin de semana casos de violencia de género, agresiones, delitos de daños, lesiones, robos y conducción bajo los efectos del alcohol.
También se ha procedido al cierre de algunas calles, a fin de evitar, en la medida de lo posible, las aglomeraciones en un contexto de emergencia sanitaria.
Concretamente, el viernes 27 de agosto se levantaron tres actas por tenencia de estupefacientes, seis denuncias de tráfico y se controlaron 65 vehículos dentro del dispositivo antibotellón de la Policía Local.
Además, los agentes de la Patrulla Verde levantaron dos actas de la Conselleria de Turismo, cuatro de la Conselleria de Sanidad, dos por COVID-19, una por venta de alcohol a menores, otra a un establecimiento de comidas al que se le precintó la cocina y dos por otros conceptos.
En cuanto al sábado 28 de agosto, el dispositivo antibotellón levantó cuatro actas por tenencia de estupefacientes, tres administrativas por etilometrías, 18 por botellón, otras 18 por COVID-19, 29 denuncias de tráfico --una de ellas por carencia de seguro--, un informe judicial y se controlaron 37 vehículos.
Por su parte, la Patrulla Verde abrió cuatro actas de la Conselleria de Turismo, otras cuatro de la de Sanidad, dos de Actividades, una por conducta incívica, 21 actas por COVID-19, una de actividad paralizada, otra de actividad precintada y 21 por otros motivos.
Al margen de estas actuaciones, los agentes de la Patrulla Verde participaron en la reanimación de un hombre que estaba inconsciente en la vía pública y que finalmente falleció tras su llegada al hospital.
Por otro lado, también intervinieron en un accidente de tráfico en Can Pastilla entre una moto y un vehículo que provocó la muerte del motorista.
La conductora del coche fue detenida por conducir bajo los efectos del alcohol y por un delito de imprudencia grave con resultado de muerte.