Según ha indicado la Guardia Civil en una nota de prensa este sábado, la investigación comenzó después de recibir en dependencias oficiales varias denuncias acerca de robos en varias perfumerías.
Así pudieron comprobar que los presuntos autores de los hurtos en ambas localidades coincidían. Su 'modus operandi' consistía en deambular por los pasillos de los establecimientos acompañados de un hijo menor de cinco años, simulando que estaban comprando con normalidad, esperando el descuido de los trabajadores para así uno introducir los artículos en su mochila mientras otro vigilaba que no fueran vistos.
La cuantía total de lo sustraído asciende a más de 1.000 euros repartidos en 60 perfumes de gama alta, valorados cada uno de ellos en más de 100 euros y otros artículos de higiene personal.
Además en el momento de su detención se aprehendieron varios bolsos de marcas conocidas, que aun llevaban las alarmas de seguridad antirrobo. Los presuntos autores de los hechos, fueron detenidos y pasarán este sábado a disposición judicial.