"La Serra de Tramuntana es muy bonita, como también lo es pasear por aquí, pero lo cierto es que hay una realidad y unas necesidades que tenemos los pueblos pequeños. La Administración debería tomar cartas sobre el asunto y ayudarnos a todos. Y cuando digo todos también me refiero a otros pueblos como Banyalbufar", ha señalado Moragues.
Del mismo parecer es Guillem Femenías, propietario del Restaurante Montimar, quien asegura que "se llenan la boca al hablar de la Serra de la Tramuntana, pero a la hora de la verdad, no hacen absolutamente nada para que estos pueblos sigan vivos. Lo cierto es que si la economía del pueblo no funciona, estas localidades acabarán convirtiéndose en pueblos dormitorio".
También criticó se muestra el propio alcalde de Estellencs, Bartomeu Jover, quien ha manifestado que "la Administración que está por encima de nosotros, tanto Consell Insular como Govern, no hace el trabajo que tendría que hacer. Y esta es una queja ya no solo de los comerciantes y restauradores, sino de los propios vecinos de la localidad".