Cabe recordar que Cort permitió a estos bares la instalación de quince mesas de cuatro plazas y sus correspondientes sillas en la Plaça del Comtat de Rosselló, pero tal y como explican desde esta asociación, "la realidad es que a la gran mayoría de negocios de restauración del mercado les es imposible su aprovechamiento debido a la distancia, a las barreras arquitectónicas y a los riesgos laborales que supone atravesar una calle y la zona de carga y descarga".
Así pues, los restauradores aseguran que "esta solicitud viene motivada por la grave situación económica que atraviesan los negocios de restauración ubicados en este mercado desde las prohibiciones de dar servicio en los interiores y el uso de barras. La mayoría de estos negocios no tienen una alternativa a las barras para servir sus productos, careciendo de terrazas exteriores".
Una vez expuesta la situación, desde la Unión de Usuarios del Mercat de l'Olivar, recuerdan que "el Govern viene instando a las Corporaciones municipales a permitir favorecer la ocupación provisional y extraordinaria de espacios para terrazas que permitan el consumo de los clientes de los negocios afectados por dicha prohibición, incluso para aquellos negocios que no podrían en base a la normativa ordinaria solicitar ocupación de vía pública para instalar una terraza".