Según destaca Periódico de Ibiza y Formentera, Vila justificó su negativa a Marina Botafoc por la ausencia de un plan especial. Sin embargo, cuando dio el visto bueno a la otra concesionaria, este plan seguía sin existir.
El que fuera jefe del departamento de Explotación de la APB, Mariano Carlos Sánchez Siguero, declaró ante Anticorrupción por el caso Mar Blau, que la oferta ganadora del concurso para gestionar Marina Ibiza no era la más adecuada de todas las que se presentaron. Con todo, después de años sin ponerse de acuerdo y tras constantes cambios de criterio, fue la que finalmente se llevó el gato al agua.
Al otro lado del puerto, en la dársena de Llevant, la APB incluye en el concurso público por la explotación de los amarres, los locales comerciales de es Martell. En las condiciones, la APB subraya que el propio organismo se desentiende de las licencias y autorizaciones pertinentes para su uso.
Asimismo, los 600 m2 disponibles para esta finalidad no podrían, en estos momentos, utilizarse como comercios ya que la falta de normas urbanísticas lo impide.
Periódico de Ibiza y Formentera asegura que el acuerdo anunciado en 2016 entre el Ajuntament d'Eivissa y la Autoridad Portuaria nunca habría llegado a firmarse. Así lo demostrarían las bases del concurso para gestionar la dársena de Llevant aprobadas en octubre de 2020, desdiciendo el contenido pactado hace 4 años atrás.