Así lo señala Miguel Ángel Santander, fundador de un centro con casi 28 años de historia, cuna de la mayoría de creadores audiovisuales de nuestra comunidad y "por el que han pasado más de 5.000 alumnos durante todo este tiempo".
"El cambio fundamental ha sido tecnológico y la evolución ha sido tremenda. Todavía recuerdo cuando salíamos a grabar con cintas enormes y un paquetón enorme unido a la cámara con un cable que parecía un cordón umbilical", señala Santander, quien reconoce que "lo que ha permanecido intacto es la pasión que ponemos todo el profesorado y el equipo de dirección".
Precisamente el profesorado es uno de los grandes valores añadidos del CEF, ya que según explica Santander "el cien por cien de los más de 50 profesores que pasan por el centro a lo largo de curso son profesionales en activo. De hecho, ya contamos incluso con algunos ex-alumnos que, después de su incursión en el mundo profesional, se han incorporado a nuestra rueda de profesores. De alguna manera, pues, hemos conseguido cerrar el círculo".
El fundador del CEF reconoce que el trabajo en el sector audiovisual "es una profesión muy vocacional. Nosotros podemos proporcionar al alumno toda la formación teórica y práctica, pero la pasión y la lucha que cada uno pongo depende de cada persona".
El CEF cuenta con unas instalaciones de primer nivel y todo el equipamiento necesario que le han permitido convertirse en el centro de referencia de formación audiovisual de nuestra comunidad. Además, su rango de formación abarca la formación profesional de grado medio y superior, así como cursos y talleres específicos para profesionales.