Esta propuesta, junto con la del cierre de interiores en la hostelería, son los dos temas que abordará esta tarde el Ejecutivo autonómico con los agentes sociales.
Las dos medidas tienen el objetivo de limitar al máximo la movilidad durante los próximos días de vacaciones de Pascua y así evitar contagios por coronavirus, ante el avance de la variante británica y el repunte de casos en la comunidad.
Si la propuesta se acuerda esta tarde en la Mesa de Diálogo Social, el Ejecutivo balear aprobaría este miércoles la medida en un Consell de Govern extraordinario y entraría en vigor este próximo viernes.
El cierre perimetral implica que los ciudadanos sólo podrían moverse entre Islas por los motivos que contempla el estado de alarma, como la asistencia a centros sanitarios; el cumplimiento de obligaciones laborales, profesionales, empresariales, institucionales o legales, o la asistencia a centros educativos, entre otros.
Cabe recordar que, la consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, ha alertado este martes del cambio en la tendencia de la pandemia de la COVID-19 en las Islas, donde en los últimos días se ha experimentado un aumento en los contagios.
"Desde el punto de vista epidemiológico estamos mejor que otros sitios, pero no vamos por buen camino. En España, hay un cambio de tendencia que puede augurar el inicio de la cuarta ola, que ya golpea varios países europeos", ha señalado.
En declaraciones a los medios, la consellera ha expresado su preocupación por esta situación y ha advertido a la población del incremento en la propagación de la COVID-19, sobre todo en Mallorca, aunque también en Menorca y Formentera. Según Gómez, este lunes la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes en Baleares era de 47 casos, mientras que la semana anterior era de 41.
