Según ha informado el Consell en una nota de prensa, la dirección insular de Gente mayor del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) ha comunicado a primera hora de este sábado la modificación publicada en el BOIB a las direcciones de los centros residenciales de la red asistencial de la isla (residencias públicas y privadas).
Esta medida afectará las salidas de los residentes, que hasta este momento solo estaban autorizadas si eran terapéuticas y siempre que estuvieran acompañados por un trabajador del centro. A partir de este domingo se permitirán las salidas con o sin pernocta de los usuarios autónomos o acompañados de un familiar en caso de los que necesiten asistencia.
Los residentes podrán salir siempre que hayan recibido formación sobre las medidas de higiene y seguridad y estén en condiciones de entenderlas y poderlas cumplir. La persona usuaria o su tutor legal, familiar o referente que se haga cargo de su cura, tendrá que firmar una declaración responsable con el compromiso de cumplir las medidas sanitarias correspondientes al nivel de alerta vigente a la unidad territorial durante todo el tiempo que dure la salida.
El tiempo que la persona permanezca fuera del centro, tendrá que seguir todas las medidas de seguridad dictadas para la población general, como por ejemplo el uso de mascarilla, mantener la distancia de seguridad, el lavado de manos frecuente y ventilación de las zonas cerradas, así como todas aquellas que estén establecidas en cuanto a número de personas en reuniones sociales y encuentros familiares, limitación de personas de diferentes núcleos familiares, etc.
Cuando se produzcan salidas con pernocta superiores a 72 horas, antes de que la persona usuaria vuelva al centro deberá de someterse a una prueba PCR y no podrá volver a ingresar en la residencia hasta que no tenga un resultado negativo o supere la enfermedad en caso de que sea positivo.
En cuanto a las visitas, se mantendrán las mismas medidas que se aplicaban hasta ahora. Los residentes podrán recibir una visita de una persona al día de un máximo de una hora y con supervisión del personal de la residencia, siempre que en el centro no haya ningún brote activo y se respeten todas las medidas de seguridad e higiene.
No se permitirán, sin embargo, visitas ni salidas a residentes o visitantes que hayan estado en contacto estrecho con una persona con COVID-19, que tengan la enfermedad o presenten síntomas.
El IMAS, como miembro del equipo de coordinación sociosanitaria, apoyará a los centros residenciales y vigilará el cumplimiento de las nuevas medidas.