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El cesto los güevos

No, no es un error de escritura. Este antiquísimo y popular alimento que prácticamente a todo el mundo nos gusta y que responde al nombre científico de Gallus gallus domesticus -el de gallina que es el mas consumido- tiene, como otros muchos ámbitos, sus propias clases sociales y, como no podía ser de otra forma, su nombre en función de su estatus. Los huevos están reservados a las clases altas, a los burgueses y sus esposas las hamburguesas, aunque en los últimos tiempos se han incorporado a esta clase nuevos ricos, políticos, estafadores, corruptores y otras gentes de mal vivir, y los comen con mucha clase y boato, ya sean escalfados con salsa holandesa o costrini con puré de coliflor y tomates secos.

Por el contrario, los güevos nos están reservados para las clases menos pudientes y para los ingenuos votantes que mantenemos a toda esa caterva de vividores que comen huevos que nosotros pagamos. Nosotros, el proletariado, los pobres currantes los comemos fritos con papas a lo pobre, con chorizo o morcilla, en tortilla y de otras muchas riquísimas formas, mojando pan y chupándonos los dedos cuando se nos manchan de yema.

Y ustedes se preguntarán a que viene este rollazo sobre los huevos (que no los güevos), pues bien, el Gallus Gallus Domesticus llego al Parlament de la mano de su señoría Dº Alejandro López, diputat y portavoz del grupo Unidas Podemos que reclamo, en tan importantísima sede, el consumo y la protección de los huevos (que no güevos) ecológicos. Dicen que el president del Parlament estuvo a punto de soltar aquella famosa expresión de “manda huevos” pero que no lo hizo porque no se podía aguantar la risa escuchando la primera, y esperamos que la última, que su señoría presentaba a la cámara.

He de reconocer que cuando veía la noticia en los medios comprobé que no era 28 de diciembre ya que no salía de mi asombro porque, encontrándonos en una situación tan grave y delicada en la que nos encontramos, en la que más de 53.000 baleares nos hemos infectado del virus y, a fecha de hoy, alcanzamos los 624 fallecidos llevar los huevos al Parlament es casi como un insulto a la ciudadanía de nuestra comunidad, aunque es posible que el lumbreras parlamentario no dé para más.

A 80 por hora.- Otro que no se como calificarlo es al lucido del conseller Sevillano. Desde el pasado lunes la velocidad máxima permitida en la vía de cintura palmesana ha pasado de los 120 a los 80 KM por hora por la gracia del morado. Son muchas las voces que se han mostrado contrarias a tan arbitraria medida que, por más que se le ha pedido, todavía no ha justificado con informe alguno. Los argumentos en los que se apoya el Sr. Conseller son tantos como razones con las que cuentan los contrarios a la medida. Sin embargo, en mi opinión, tal decisión solo responde a una infantil necesidad de dejar constancia de su paso por la insular administración.

El enemigo en casa: A la Sra. Armengol se le ha instalado el enemigo en su propia casa. Como en la última cena a Jesucristo se le sentó Judas, en la mesa del Consell de Govern se le sientan varios judas dispuestos a traicionar el pacto por un puñado de votos.

Unos por activa y otros por pasiva, los socios del Psoe no están guardando la fidelidad debida al pacto que los llevo al gobierno y les mantiene en el poder. Lo que es incomprensible que unos y otros, traicionados y traidores sigan juntos a pesar de las públicas diferencias, a menos que en el Govern estén por el sillón en lugar de por hacer política para la ciudadanía que es para que los votamos.

Los JETARGOS.- La pandemia nos ha traído muchas cosas y ninguna buena. Una de estás nuevas cosas malas que nos ha traído con la llegada de las vacunas ha sido una nueva forma de corrupción. Los JETARGOS o, lo que es lo mismo, cargos can una gran jeta. Políticos, Obispos, cargos de confianza y otras subespecies que se han aprovechado de su cargo para saltarse todas las listas y protocolos con el fin de ser vacunados sin que les toque.

Cargos con un morro que se lo pisan, con más cara que espaldas y un rostro mas duro que el hormigón que les ha importado la situación de personas de riesgo, personal sanitario y otros en la franja de ser vacunados que se han quedado sin la dosis que les correspondía porque estos corruptos han tenido la necesidad injustificada de inmunizarse, como si a alguien les preocupara la supervivencia de tan despreciables clases.

Seguro que muchos se preguntan a qué viene este batiburrillo, fácil, YO YA ESTOY HASTA LOS GALLUS GALLUS DOMESTICUS

Actualizado: 14 de marzo de 2022 , , , , , ,

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