Unas medias que, inicialmente, tenían que entrar en vigor este martes, pero que finalmente el Govern decidió posponer hasta este miércoles.
Una decisión que caldeó, todavía más, los ánimos en el sector de las hostelería y la restauración. De hecho, desde las patronales de restauración de CAEB y PIMEM consideran que se trataba de una maniobra para impedir que los restauradores acudieran en masa a la concentración promovida por el sector en contra de las medidas del Govern. Y es que las patronales consideran que este cierre es totalmente desproporcionado y supondrá la estocada definitiva para el sector.
Otro de los sectores que se ha visto totalmente perjudicado por estas nuevas medidas es el de las grandes superficies. Desde la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) han calificado esta medida de "discriminatoria".
Por su parte, desde la Asociación de Empresarios de Instalaciones Deportivas de Balears (AEIEB), aseguran que el Govern los ha "condenado a muerte" y piden a la Administración que se les considere "como un servicio esencial".
Los diferentes sectores afectados por las restricciones ven el futuro inmediato muy negro. Todos reclaman ayudas directas para poder salir adelante, especialmente si estas medidas duran más de dos semanas.
