Esta diferencia de 407.000 euros es fruto de la reducción en los ingresos derivada de la bajada de tasas municipales, como por ejemplo la de ocupación de la la vía pública, a causa de la pandemia de la Covid-19.
Según ha explicado el alcalde, Juan Rodríguez, se trata de un presupuesto "realista, adaptado a la situación económica y social del municipio y destinado a cubrir las necesidades de los ciudadanos". Además, ha destacado que se trata de unas cuentas cambiantes, "que se irán adaptando a la evolución de la pandemia y a las necesidades que se deriven de la misma".
La partida más elevada es la destinada a Servicios Sociales, que duplica la cantidad presupuestada respecto al ejercicio anterior y que llega a los 400.000 euros. "Sabemos que los próximos meses tendremos una avalancha de solicitudes por parte de personas y familias con necesidades básicas que se tendrán que cubrir y tenemos que estar preparados para dar la ayuda necesaria", ha señalado el alcalde.
Aparecen partidas nuevas como la destinada a limpieza y desinfección de calles, zonas comunes y edificios públicos. También se espera que una vez aprobadas de manera definitiva las cuentas municipales se pueda emplear el remanente de tesorería en ayudas directas a autónomos, tejido empresarial saliner y colonier y "todos los sectores económicos que necesiten una ayuda para llevar a cabo su actividad y activar el municipio".
"Es el presupuesto de la gente, pensado y configurado para garantizar la calidad de vida de nuestros ciudadanos, para que todos y cada uno de los saliners i coloniers esté bien atendido", ha concluido Rodríguez.
