Así lo ha confirmado en rueda de prensa, en la que Armengol ha estado acompañada por la consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, para informar de tres estrategias concretas: vacunación en Balears, realización de cribados masivos y dispositivo para el control de PCR negativa para viajeros nacionales en puertos y aeropuertos.
Ambas han remarcado que el cribado masivo en Inca forma parte de la decisión del Govern de realizarlos en municipios de Balears o barrios con "una incidencia muy alta del virus".
En este sentido, ha explicado que esta decisión se ha comunicado durante la reunión con miembros del consejo ejecutivo de la Federación de Entidades Locales de las Illes Balears (Felib) para hacer un seguimiento de la situación sanitaria en los municipios en relación a la COVID-19.
Armengol ha subrayado que esta decisión "no es política, sino técnica". "Los cribados siempre se harán cuando lo recomienden los expertos y no a todos los municipios o barrios, sino donde se cumplan los criterios técnicos porque se debe hacer un buen uso de los recursos públicos", ha dicho.
Asimismo, ha indicado que estas pruebas diagnósticas a la población se harán con test de antígenos, que desde el 2 de octubre se utilizan también en la detección de la COVID-19 en Atención Primaria.
La presidenta ha especificado que tampoco se harán estos cribados masivos en aquellos lugares donde "estén bien localizados los brotes de contagios". "Si se hicieran cribados a todos los municipios porque sí, no sería efectivo", ha explicado y ha justificado su decisión en que "se podría crear una expectativa negativa en la población con posibles falsos negativos".