Según ha informado Triay este domingo en declaraciones a Europa Press, "ojalá fuera posible" que el plan de vacunación de la COVID empezará en enero. Si bien, ha continuado, "la mayoría de vacuna se encuentran aún en fase tres, una fase experimental, en la que se han hecho pruebas pero a un número limitado de personas, por lo que falta cobertura".
En esta línea, ha considerado que las afirmaciones del ministro Illa, quien este sábado en una entrevista en Rac1, recogida por Europa Press, aseguró que el plan de vacunación contra la COVID-19 empezará en enero de 2021 y no será de carácter obligatorio para toda la población, son "un poco precipitadas y optimistas".
Las declaraciones del ministro de Sanidad "son un intento de trasladar esperanza a la población", ha apuntado Triay, quien ha insistido en que "hay que ser prudentes, porque, de momento, los resultados que se tienen son preliminares".
Asimismo, sobre la intención del Gobierno de "tener a la mayoría de la población inmunizada" entre los meses de mayo y julio del mismo año, según dijo Illa, el delegado de Simebal en Menorca ha apuntado que no cree que hasta mediados de 2021 se posible "una vacunación masiva".
Por otro lado, sobre la afirmación del ministro de Sanidad de que la vacunación no será obligatoria y las palabras de la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, apuntando que "la obligatoriedad de las vacunas no es legalmente posible", Triay ha asegurado que es un tema "muy complicado porque afecta a la libertad individual y a la salud pública".
Al respecto, ha defendido que "desde el punto de vista científico debería de ser obligatoria, siempre que sea eficaz y no tenga efectos secundarios, para evitar así poner en riesgo a otros".
"Hay que concienciarse de que la obligatoriedad no iría contra de la libertad de nadie. No hay que tener tanto miedo a la vacunación", ha insistido el delegado de Simebal en Menorca, quien pese a su opinión ha reconocido "no saber si desde el punto de vista jurídico es posible obligar a alguien a vacunarse".