Endesa ha explicado este miércoles que la ayuda, que se enmarca en la segunda fase del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa frente a la COVID-19, se destinará a la cobertura de las necesidades más básicas de este colectivo, especialmente en la alimentación, limpieza y productos de higiene para niños y bebés.
Desde el comienzo de la pandemia, Cáritas se ha convertido en un punto clave de logística y distribución de productos de primera necesidad para atender a las familias más vulnerables. Esta atención se hace a través de los centros de distribución de alimentos que están repartidos en Mallorca para cubrir la demanda de las familias con menos recursos.
También se hace comida casera diario para más de 130 personas en el comedor social de Inca, que con la situación actual lo vienen a recoger para llevárselo.
La cantidad dada se destinará exclusivamente a reforzar los programas de ayuda que Cáritas preste a consecuencia de la situación sanitaria y social derivada del coronavirus.
En junio, Endesa ya colaboró con los proyectos de cada Cáritas Diocesana de Baleares, un proyecto adaptado a las necesidades de cada isla, con una aportación económica de 200.000 euros, que se hizo directamente a Cáritas Mallorca, Cáritas Menorca y Cáritas Ibiza y Formentera.
