Su candidato, Santiago Abascal, sólo ha recibido el apoyo de sus 52 diputados, muy lejos de la mayoría absoluta (176 votos) necesaria para que triunfase, y ha cosechado votos 298 en contra, incluyendo al PP, UPN y Foro Asturias.
Conforme al Reglamento, la votación fue pública y por llamamiento, pero en esta ocasión, con motivo de las restricciones derivadas la pandemia, sólo pudieron decir su voto de viva voz los presentes en el hemiciclo. El resto lo hicieron vía telemática y el sentido de su voto fue leído por el secretario de la Mesa del Congreso.
Para relevar a Sánchez, el candidato de VOX necesitaba reunir la mayoría absoluta de la Cámara, 176 votos, y como no lo ha logrado la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha dado por rechazada la iniciativa.
Abascal ha obtenido sólo el 'sí' de los 52 diputados de VOX, el 15% del conjunto de la Cámara, por lo que su candidatura ha sido rechazada por 298 votos, los que suman los diputados del PSOE, el PP, Unidas Podemos, ERC, el Grupo Plural (Junts, Más País, Compromís y BNG), Ciudadanos, PNV, Bildu y el heterogéneo Grupo Mixto (CUP, UPN, CC, NC, PRC, Foro Asturias y Teruel Existe). Nadie se ha abstenido.
Así las cosas, la moción de VOX se ha convertido en la menos votada de la reciente historia democrática, por debajo incluso de los 68 votos de la Alianza Popular de Antonio Hernández Mancha en 1987 y de los 82 que cosechó Pablo Iglesias y Podemos en 2017.