Según han informado los Socialistas este sábado en nota de prensa, la iniciativa, elaborada por el diputado Joan Ferrer, pretende hacer frente a la problemática del acoso inmobiliario, un nuevo delito que consiste en "utilizar presiones psicológicas, cortes de luz, averías sin arreglar, negativa a cobrar la renta, abandono del mantenimiento del edificio y carencia de higiene".
En este sentido, ha explicado Ferrer, se trata una práctica que "sufren especialmente personas mayores o con dificultades que viven en pisos que son de renta antigua" o bien, ha añadido, quienes se encuentran en una situación en la que "los propietarios intentan que los inquilinos dejen sus pisos para poder especular con viviendas".
Para hacer frente a esta realidad, el diputado socialista en el Parlament ha propuesto esta iniciativa para que, a través de la aplicación de la Ley de Vivienda, "se puedan detectar casos de acoso inmobiliario, actuar contra las personas que ejercen esta práctica y que se implanten una serie de medidas para asesorar y ayudar a las personas que lo sufren".
Al mismo tiempo, ha continuado, la iniciativa socialista contempla reforzar la asistencia en términos de servicios sociales a personas que ahora mismo tienen problemas para seguir pagando su alquiler o hipoteca, "con un Servicio de Acompañamiento a la Vivienda que tenga cuidado de las personas que sufren acoso inmobiliario y de aquellas que pasan por serios problemas económicos para hacer frente a los gastos de su vivienda".
Finalmente, la PNL también insta el Gobierno central para que, a través de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el Poder Judicial, se intensifiquen y mejoren las medidas de detección, persecución y sanción de este delito.
Esta iniciativa se suma a las medidas para paliar la carencia de vivienda en las Islas tales como, ha concluido el socialista, "el aumento de ayudas para el alquiler, en un momento de crisis sanitaria y económica, sin parar la política de construcción de viviendas públicas para ser destinadas a alquiler".