Acacia Renewables cuenta en la actualidad con dos parques eólicos marinos en desarrollo, con una potencia conjunta de 1,2 GW, que podrían estar operativos en 2028. Adicionalmente, dispone de otros cuatro proyectos en cartera, que suman una capacidad de 2,1 GW. Iberdrola ostentará una participación igual a la de GIG en estas seis instalaciones y ambos socios se encargarán de desarrollar los proyectos.
La operación está alineada con la estrategia de Iberdrola y le permite posicionarse en una etapa de desarrollo inicial en el sector eólico marino japonés, un mercado que cuenta con un gran potencial de crecimiento. El acuerdo posibilita a la compañía el acceso a una cartera de proyectos diversificada, situada en diferentes áreas del suroeste del país, en un entorno óptimo para las subastas anunciadas por el Gobierno de Japón.
Iberdrola y GIG se comprometen, además, a trabajar en reforzar colaboraciones sólidas en Japón, incorporando a nuevas compañías locales a los desarrollos.
Acacia dispone de un equipo con experiencia en la gestión de instalaciones renovables y un profundo conocimiento del mercado, así como de oficinas en Japón; condiciones clave para liderar por sí misma el desarrollo de nuevos proyectos futuros en el país.
La adquisición de esta promotora renovable local abre a Iberdrola la oportunidad de desembarcar en el mercado eólico marino japonés, que atraviesa actualmente una fase inicial y presenta un gran potencial de crecimiento para las próximas décadas, además de un entorno favorable para la inversión.
La capacidad eólica marina instalada en Japón se reduce en la actualidad a unos 70 MW, pero el país ha desplegado una estrategia para descarbonizar su mix energético y promover la independencia energética. De hecho, las previsiones apuntan a que el mercado alcanzará los 10 GW instalados en 2030 y hasta los 37 GW en 2050.
La adquisición de Acacia Renewables está alineada con la estrategia de Iberdrola de consolidarse como la mayor compañía renovable del mundo, añadiendo nuevos proyectos a su cartera, y se suma a otras transacciones realizadas por la compañía en los últimos años en el ámbito de la eólica marina.
Operaciones que han permitido el desarrollo de parques en el mar Báltico alemán (Wikinger y Baltic Eagle), en el Mar del Norte (East Anglia ONE), Irlanda (West of Duddon Sands), la costa de Massachusetts (Vineyard Wind), la francesa (Saint Brieuc) y, más recientemente, el acceso a 9 GW de capacidad en Suecia. Adicionalmente, Iberdrola cuenta en este segmento con una cartera total de 15 GW.
La compañía liderada por Ignacio Galán protagoniza con la adquisición de la nipona Acacia su sexta operación corporativa en lo que va de año, a pesar de los desafíos derivados de la COVID-19. A las transacciones en eólica marina en Francia y Suecia se suman la adquisición de la empresa francesa de energías renovables Aalto Power, los acuerdos para desarrollar 165 MW eólicos terrestres en Escocia y, más recientemente, la compra de Infigen Energy, con la que se ha convertido en uno de los operadores líderes del mercado australiano de energía renovable.
Iberdrola confía en que la electrificación actuará como palanca de cambio en el mundo postCOVID. Por ello, la empresa ha acelerado inversiones, con el objetivo de contribuir a la reactivación de la actividad económica y a la generación de empleo.
Esta apuesta por una recuperación en verde ha llevado al grupo a comprometer inversiones récord este año de 10.000 millones de euros en energías renovables, redes eléctricas inteligentes y sistemas de almacenamiento a gran escala, tras haber destinado a estas áreas 100.000 millones desde 2001 en todo el mundo.
Iberdrola opera actualmente 32,7 GW renovables a nivel global y cuenta con una cartera de proyectos renovables s los 58 GW.