El curso comenzará en el llamado 'escenario B', de semipresencialidad. La enseñanza será presencial en Infantil, Primaria y 1º de ESO, siempre garantizando el metro y medio de distancia y con ratios de alumnos por aulas que se sitúen alrededor de los 20, en función del espacio disponible.
A partir de 2º de ESO, Bachillerato, Formación Profesional y Estudios de Régimen Especial, los centros educativos pudieron optar por sistemas de enseñanza semipresencial o presencial.
Desde este jueves volverán a las aulas un total de 170.369 alumnos, lo que supone 118 más que en el curso anterior, un incremento bastante más moderado que el de años previos, que venía situándose en unos 2.000 alumnos más.
Sin embargo, no todos ellos vuelven al colegio este jueves de forma simultánea, sino que se hará de forma escalonada. La incorporación progresiva del alumnado se iniciará en los cursos inferiores y en 2º de Bachillerato. No se podrán superar los 150 alumnos por día hasta completar el 100% del alumnado del centro educativo.
Este inicio progresivo se hará en un máximo de cinco días lectivos en los centros de hasta 750 alumnos y de 10 días lectivos en el resto.
Los centros contarán este curso con 560 docentes más, 397 en la pública -aunque 17 están pendientes de adjudicar- y 163 en la concertada. Esto supone una inversión de casi 26 millones de euros. Además, el Govern prevé implantar un sistema de "sustituciones exprés" de profesores para que los centros no se queden en ningún momento sin el personal necesario.
Con las nuevas incorporaciones se ha buscado rebajar las ratios, que se han fijado en torno a 20 alumnos/aula.
Entre otras medidas por el COVID, los centros podrán hacer turnos por la mañana y tarde por cursos o etapas educativas; se crearán grupos de convivencia o 'burbujas'; no se pueden llevar juguetes de casa; las entradas y salidas al centro escolar se realizarán de forma escalonada; y se dispondrá de aulas de aislamiento para casos sospechosos.
Además el Govern ha invertido diversas cantidades en compra de equipos informáticos para alumnos que los necesiten para seguir clases 'online', y de material de higiene y salud y equipos de protección individuales. También se han reforzado el funcionamiento de los comedores y la limpieza.
Los sindicatos Unión Obrera Balear (UOB) y Unión Sindical Obrera (USO) han rechazado que comience el curso escolar con estas condiciones, ya que consideran que no hay suficientes garantías para los trabajadores, los alumnos y las familias.
UOB ha convocado formalmente una huelga para el lunes 14 y ha hecho un llamamiento a las familias para que no lleven a sus hijos a la escuela. Además, realizará una concentración frente a la Conselleria de Educación este viernes a las 11.30 horas.
Como servicios mínimos se han fijado un docente por cada cuatro grupos en secundaria y primaria, y un docente por cada tres unidades en Infantil y Educación Especial.
Desde UOB han lamentado que el resto de sindicatos en las Illes no se hayan sumado a la convocatoria de huelga, a diferencia de la ocurrido en Madrid.