Así lo anunció este pasado jueves la presidenta del Ejecutivo balear, Francina Armengol, en una rueda de prensa en la que explicó que se están planteando medidas como reducir aún más los aforos, rebajar el máximo personas en reuniones sociales o restringir las salidas del domicilio por la noche.
Estas medidas, que se aplicarían de forma específica para cada zona -es decir, no tienen por qué ser las mismas restricciones para todas las áreas señaladas como "zonas calientes"- tendrían una vigencia de 15 días.
Esta nueva normativa se aprobará en el primer Consell de Govern que se celebra hoy lunes en lugar del viernes, puesto que a partir de este mes de septiembre cambia el día de la semana en que se producirán las reuniones del equipo de gobierno autonómico.