En rueda de prensa, Cerdó, quien ha estado acompañado este martes por el director general de Fincallorca, Benjamin Schleining, ha informado de la situación de la actividad del alquiler turístico vacacional en Baleares.
En este sentido, ha solicitado también al Consell de Mallorca la posibilidad de alquilar las viviendas más de un mes con el objetivo de "salvar el invierno" con peticiones de alquiler de larga duración. Según la Ley de Turismo de Baleares, el tiempo máximo de alquiler de una finca turística vacacional es un mes.
"Esta epidemia nos ha fastidiado mucho. Al principio del desconfinamiento creíamos que la temporada se solucionaría, pero con la medida de Reino Unido pegó un bajón", ha señalado Cerdó, para después cifrar en un 27% la ocupación actual en fincas turísticas vacacionales.
El presidente de Estancias Turísticas Vacacionales ha precisado que no piden un cambio de uso, sino que el Consell de Mallorca dé "flexibilidad en los tiempos de alquiler" para poder hacer frente a las pérdidas.
Desde la ETV, según Cerdó, se están recibiendo "muchas consultas" sobre hacer un cambio de uso y pasar de alquiler turístico vacacional a alquiler tradicional "porque muchos propietarios prefieren ingresar algo, aunque sea poco, que no ingresar nada".
El inconveniente con el que se encuentran los arrendadores es que, en el caso de pasar a alquiler de larga duración, "perderán la licencia de vacacional y será la ruina para ellos".
"Entendemos que la presidenta del Consell de Mallorca debería darnos una solución y creemos que la mejor es permitirnos hacer el cambio de uso durante los dos años que recoge la LAU y, pasado ese tiempo, poder recuperar nuestra licencia vacacional", ha señalado.
Además de la moratoria en el cobro del impuesto turístico vacacional, desde Estancias Turísticas Vacacionales han solicitado una moratoria en el cobro de impuestos como el IBI o la tasa de basuras. Cerdó ha señalado que estos pagos, por ejemplo, no les corresponde las viviendas vacacionales, pero sí a las turísticas vacacionales.
Actualmente, en Baleares hay federadas en torno a 13.000 fincas turísticas vacacionales. Fincallorca gestiona unas 1.500 viviendas y 12.000 reservas al año.
En las últimas semanas, tanto la ETV como Fincallorca, y otros portales destinados al alquiler vacacional, han recibido multitud de anulaciones por el riesgo que les supone tener que cumplir una cuarentena al regresar a su país de origen.
Por su parte, el director general de Fincallorca, Benjamin Schleining, ha mostrado su preocupación por la situación. "Hemos venido expresamente desde Alemania para mostrar nuestro apoyo a los propietarios y para que, todos juntos, encontremos las soluciones más óptimas para el momento que estamos viviendo", ha dicho.
No obstante, desde Fincallorca creen que el presente es "desesperanzador pero el futuro será mejor" porque, en el momento que consigamos estabilizar la situación sanitaria, "el mercado del alquiler vacacional mejorará y será uno de los primeros en recuperarse por la seguridad que ofrecen".