Según ha informado el Ayuntamiento, la inspección se ha llevado a cabo en coordinación con el inspector técnico de emergencias y con la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía.
En el operativo, los agentes han comprobado las licencias de actividades de estos establecimientos y han aplicado las medidas restrictivas de suspender la actividad en salas de fiesta, café conciertos y bares de copas.
Al ser informados los responsables de los locales cerrados, éstos se mostraron disconformes con el cierre y tuvieron que ser desalojados con la colaboración de la Policía Nacional. Otros siete fueron cerrados al público sin ninguna actuación.