El gasto en estas prestaciones experimenta una subida del 11,7% respecto al mes de abril, como consecuencia de la crisis del COVID-19. Este elevado nivel de prestaciones es el resultado de sumar las prestaciones que cobraban las personas que ya estaban en desempleo antes de la crisis sanitaria, las que perdieron su empleo desde entonces y, sobre todo, a las personas que están en Expedientes de Regulación Temporal de empleo (ERTE).
La cuantía media percibida por beneficiario es en Balears de 929,9 euros al mes, la más alta del país. Esta cantidad ha crecido en 52 euros respecto a mayo de 2019.
En Balears hay 37.842 beneficiarios extranjeros de prestaciones por desempleo. De ellos, 19.378 son de países de la UE y 18.464 de países extracomunitarios. La cifra de beneficiarios extranjeros en la Comunidad es casi 15 veces superior a la registrada hace un año.
En el conjunto de España, en el mes de mayo, se alcanzó el nivel máximo de protección del SEPE, que dio cobertura a casi 6 millones de personas.
El SEPE pagó en prestaciones 5.526 millones de euros, de los que 3.318 millones se dedicaron a pagar prestaciones por ERTE y 2.208 millones a prestaciones por desempleo, tanto en el nivel contributivo como en el asistencial.