Las asociaciones del sector audiovisual, APAIB, APAI, ACIB y CIMA se muestran decepcionadas después de la última reunión mantenida con la consellera de Administracions Públiques y los responsables de IB3. Las razones de esta decepción son la confirmación de la disminución del presupuesto real destinado a la producción de contenidos en 2 millones de euros, y las consecuencias que tendrá esta disminución: cierre de productoras y centenares de trabajadores afectados.
Las asociaciones lamentan la carencia de compromiso de la consellera al no incrementar este presupuesto, ni con partidas extraordinarias (el cual sí se ha producido con los trabajadores de la subcontrata de informativos, hecho que las asociaciones celebran) ni con el equilibrio procedente de otras partidas del presupuesto de IB3.
La consellera tampoco se comprometió a garantizar que, ante esta grave situación, el 100% de presupuesto para contenidos se contratará a empresas locales. En este sentido, la gerente del ente, Marga Cardona, confirmó que la televisión autonómica tiene previsto contratar alrededor de un millón de euros con concursos a la productora de capital chino Mediapro.
El planteamiento de la dirección del ente para este año es de parrilla continuista, lo cual quiere decir que solo se contratarán programas que ya son parte de la parrilla. Este hecho supondrá que solo habrá presupuesto para cuatro nuevas convocatorias de programas. Estas convocatorias suponen 300.000 euros, cantidad que las asociaciones consideran totalmente insuficiente y que provocará que la mayor parte de las productoras no puedan trabajar.
Las asociaciones han pedido la intervención urgente de la presidenta del Govern, Francina Armengol. Exigen el incremento del presupuesto destinado a contenidos, igual que se ha hecho con informativos, y el compromiso del Govern para que las productoras locales lleven a cabo el 100% de la programación, especialmente en estos momentos de crisis, así como el incremento de la producción en Menorca y las Pitiusas.
Los representantes de lo audiovisual consideran que, si el sector se hunde, habrá estado por una decisión del Govern de les Illes Balears que, con sus medidas o la carencia de ellas, habrá condenado este tejido productivo y sus trabajadores a la extinción. Añaden que el Govern no se puede quedar parado ante este hecho o será, finalmente, responsable de sus consecuencias tanto para las empresas como para los trabajadores y sus familias.