En primer lugar, la representante de los empresarios instaladores de Baleares, nos comentó de que forma se ha acogido en el sector las fases de desconfinamiento y cómo se han adaptado a la situación durante los últimos 50 días. "Está siendo un momento de incertidumbre. La primera fase del confinamiento fue un poco preocupante porque no sabíamos cómo proteger a nuestros trabajadores. Hemos trabajado un 20% de trabajo real por lo tanto con 80% de pérdidas económicas".
Por otra parte, señaló qué medidas piden a las instituciones para que el sector de los instaladores pueda salir con el menor daño posible: "Hay que incentivar la eficiencia energética, puede ser una gran salida para nuestras empresas. Ayudas fiscales para que no haya tanta presión impositiva y que se amplíen los créditos ICO. Es más difícil de lo que parece ya que llegan con condiciones distintas a las anunciadas".
Además aseguró que su sector podrá reiniciar su actividad en la fase 2, aunque en la fase 1 se podrán llevar a cabo actuaciones sin tener contacto de forma directa con los clientes. A continuación, solicitó que haya directrices claras por parte de la administración en el tema de la protección. "Se suman sobrecostes y también es importante que los materiales de protección se vayan utilizando forma correcta. Se recomiendan las mascarillas ffp2 y pedimos que haya unas instrucciones y directrices claras por parte de la administración".
Finalmente aseguró que la asociación cuenta con asesores que solventan dudas a sus asociados y que la formación de los profesionales y los planes de negocio van a ser claves para poder sobrevivir a la actual coyuntura.