En una nota de prensa, el PI ha explicado este lunes que el objetivo de la petición es cubrir las necesidades de los colectivos más afectados, desde el personal sanitario a personas con patologías mentales previas, pasando por los familiares de las víctimas de la COVID-19 y personas en situación de vulnerabilidad económica o social, entre otros.
Desde el PI han asegurado que el confinamiento de la mayoría de la población y la parada de todas aquellas actividades no esenciales han provocado "graves consecuencias económicas y sociales sin precedentes" y, por otra parte, una serie de efectos psicológicos, que van desde la incertidumbre a la angustia, pasando por el miedo al contagio o a perder el trabajo, entre otros.
La portavoz parlamentaria de El PI, Lina Pons, ha recordado que, en este sentido, por ejemplo, "el número de llamadas que ha recibido el Teléfono de la Esperanza en Baleares se ha duplicado desde el comienzo de la crisis del coronavirus". "Muchas de estas sensaciones tendrán una continuidad más allá del final del confinamiento", ha recalcado.
Por este motivo, Pons ha exigido que el Govern trabaje "para paliar o minimizar estos efectos psicológicos" mientras perdure en el tiempo la crisis sanitaria. Asimismo, la iniciativa de El PI ha demandado, también, que la Conselleria garantice la continuidad del servicio gratuito de atención psicológica específico para los profesionales sanitarios.
La diputada Lina Pons ha valorado la medida del Colegio Oficial de Médicos de Baleares que pone a disposición de sus colegiados un servicio gratuito de 'telesuport' psicológico directo, presencial o por vídeollamada.
