En concreto los acuerdos a los que han llegado los grupos políticos piden “flexibilizar la regla fiscal de estabilidad presupuestaria, sostenibilidad financiera y de regla de gasto que impiden actuar a la administración más próxima ante los ciudadanos, de forma que permita reforzar las políticas sociales y de reactivación económica que requiere y requerirá la crisis de la COVID-19”.
Además, se pide que “se elimine el límite máximo de 300 millones que disponen el conjunto de las corporaciones locales para financiar las ayudas económicas y todas las prestaciones de servicios gestionadas por los servicios sociales de atención primaria y atención a la dependencia”.
También. los grupos del consistorio piden “Que no se negocie ninguna fórmula para que el Gobierno pueda disponer de los fondos de las entidades locales” y que “se permita a las entidades locales ejercer su autonomía para establecer medidas de estímulo en la demanda y reactivación de la economía con sus propios recursos” sin las restricciones de la conocida como “Ley Montoro”.
Debemos recordar que el Ajuntament de Marratxí es una entidad que cada año tiene superávit, sin deuda bancaria y con casi 40 millones de euros de remanente de tesorería en los bancos sin poder utilizar por estas regles fiscales.
