En ellos se detalla que se realizaron pagos en enero de 2020 por importe de 114 millones de euros y que quedaron pendientes de pago (excediendo los plazos legales) facturas por importe de 139 millones de euros.
Ante esta cifra y atravesando una grave crisis sanitaria que tendrá graves perjuicios económicos en el futuro para el tejido empresarial balear, el presidente de la federación, Jordi Mora, ha asegurado que es necesario "poner en circulación ese dinero de inmediato".
"Estamos hablando de una herramienta que generaría una rápida liquidez entre nuestras pymes y autónomos. Sería una inyección de efecto inmediato" ha continuado el presidente. Este pago de facturas pendientes podría beneficiar incluso a que estas empresas perjudicadas no tuvieran que solicitar créditos financieros o incluso a ayudar a mantener sus plantillas actuales.
PIMEM, al igual que la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (en la que se encuentra adherida) ve "necesario y urgente" que se ordene por parte del Gobierno Central "la liquidación de todas las facturas pendientes de pago por parte de las AA.PP".