Desde las instituciones se ha comprado material, pero o sigue siendo insuficiente o tarda mucho en llegar. Por ello, una vez más, la solidaridad gana protagonismo y llega donde no lo hacen las administraciones competentes.
En este caso, ante la preocupante situación, Martí Sastre y Nuria López decidieron dar una mano y pusieron en marcha su impresora 3D para comenzar a imprimir mascarillas de protección para todos los sanitarios y profesionales que las necesitan.
De hecho, tras imprimir las primeras caretas comprobaron la cantidad de profesionales que necesitaban de este material y decidieron comprar otra impresora para doblar la producción.
Así, a día de hoy, ya son cerca de 250 caretas las que han producido y han hecho llegar al Hospital de Son Espases, al Hospital General, en la Juaneda, dentistas, veterinarios, farmacias, a numerosos PACS de Palma e incluso a centros sanitarios o residencias de Manacor, Sóller o Santa María, entre otros municipios.