Además, representantes del sector del Taxi y de los VTC, que son vehículos con conductor y de la misma federación, expusieron su situación ante la competencia desleal que cada temporada padecen, sobre todo en diferentes puntos de la isla de Eivissa.
Los presentes también se pronunciaron sobre la moratoria impulsada desde el Govern que pide no reservar cruceros en el puerto de Palma a partir del año 2022. Desde la FEBT entienden que la sociedad balear quiera preservar su medio, pero también recuerdan que sin actividad empresarial esta cuestión podría ser difícil de conseguir, por lo que abogan al encuentro de una solución equilibrada.
Si bien es cierto que la federación se muestra contraria a limitar la llegada de cruceros, no se cierra en banda a la hora de buscar otras alternativas como escalar las llegadas o repartir a los cruceristas.