En declaraciones a los medios, Pomar ha mostrado su apoyo a los pequeños comerciantes y ha asegurado que "están heridos de muerte". "Si no se lo creen, les animo a caminar por las tardes o el fin de semana por el centro de la ciudad", ha dicho.
"Desde Ciudadanos vemos bien ir hacia un modelo de peatonalización, pero antes que nada debemos dar una solución para que los vecinos lleguen a los comercios de la zona", ha dicho.
En este sentido, ha añadido que "no se puede cerrar la ciudad al tráfico, no construir un aparcamiento subterráneo ni disuasorios a las afueras y, encima, quitar las paradas de autobuses como han hecho en las Ramblas", ha lamentado.
"Nuestro grupo municipal trae al Pleno, por segundo mes consecutivo, una propuesta para construir un parking en Nuredduna antes de peatonalizar", ha explicado Pomar, quien ha indicado que "esta propuesta es una reclamación de más de 5.000 vecinos, por lo que votar en contra es olvidarse del consenso del que tanto hablan".
"El consenso para este equipo de gobierno es que, con el proyecto en marcha, se vaya la regidora de Infraestructuras, Angélica Pastor, a reunirse con los vecinos y decirles que esto es lo que hay y que si les gusta bien y sino también", ha denunciado la portavoz de Cs en Palma.
Finalmente, Pomar ha defendido una propuesta para "habilitar parkings disuasorios en Son Moix, Sa Riera y Son Fuster, que se conecten con el centro de la ciudad a través de autobuses lanzadera eléctricos y gratuitos".
Asimismo, la portavoz naranja, Eva Pomar, se ha mostrado a favor de una propuesta para reclamar una prórroga en la Ordenanza de Ocupación de la Vía Pública.
"La legislatura pasada presentamos 16 enmiendas a la Ordenanza, porque veíamos que no existía un consenso con los restauradores y que había puntos que podían perjudicar a la economía de los negocios", ha manifestado.
Pomar ha explicado que "aunque sabemos que el equipo de gobierno votará en contra, nosotros mostramos nuestro apoyo a la propuesta porque queremos que exista el máximo consenso y que se eviten las fricciones entre vecinos y restauradores".
Finalmente, Pomar se ha opuesto a que "se obligue a retirar los toldos y cambiarlos por sombrillas". "Los restauradores no pueden estar cada cuatro años cambiando de toldos a sombrillas y de sombrillas a toldos porque el bipartidismo es incapaz de consensuar con los agentes implicados".