Así lo ha informado en rueda de prensa este miércoles el conseller de Movilidad y Vivienda, Marc Pons, quien ha destacado que el proyecto será una "radiografía" y un "instrumento de análisis" del Ejecutivo para afrontar la "problemática estructural y de calado" que existe con la vivienda en Balears. El monitor se presentará, junto con otras medidas, el próximo lunes en la Mesa de Vivienda.
"El monitor nos mostrará lo que es la realidad de la vivienda en las Illes, sí que es cierto que tenemos mucha información pero no es suficiente y, además, buena parte de ésta no lo objetiva, contrastada y fiable que debería de ser. Era necesario aportar luz a la información y producir de nueva", ha explicado Pons.
Durante su intervención, el director técnico de la Fundació Impulsa Balears, Antoni Riera, ha justificado la necesidad de la iniciativa, alertando que el precio del alquiler y la compraventa en el archipiélago es de los más caros del Estado, mientras que las rentas familiares están por debajo de la media. Esto implica un "esfuerzo bruto elevado" para las familias residentes.
En la herramienta, el director de la Fundació ha explicado que, además del primer encargo de los precios, también se mostrará el porcentaje de viviendas con tenencia de alquiler no cedido o la tasa de accesibilidad separada por colectivos, cifras que, según ha matizado, se desconocen.
Riera ha indicado que el Ibavi ha trasladado diferentes necesidades a la Fundación para incluir en el proyecto entre las que hay, por ejemplo, formular acciones específicas adaptadas a patrones, disponer de información homogénea y comparable, de resultados territorializados y transferir un conocimiento estratégico, entre otros.
Con todo, el objetivo es convertir una plataforma de sistematización o de información en un 'drashbord', es decir, en otra de visualización de los resultados que sea pública. Los pasos son planteamiento, generación de información, explotación de ésta, elaboración del recurso final y distribución de las cifras.
La Conselleria dirigida per Pons dispone de una partida presupuestaria este 2020 de un total de 200.000 euros ligada al trabajo directamente encomendados a la Fundació Impulsa y a otros estudios.