En sus manos está dar el empujón definitivo a un problema que se está cronificando y causando graves perjuicios a la sociedad en general.
Si bien se trata de unos inconvenientes que no se ven a simple vista, un análisis meditado si permite hacerse una idea aproximada de todo lo que implica no poder disponer de los pertinentes informes de Recursos Hídricos a tiempo.
Un departamento que depende de la Conselleria de Medi Ambient que, actualmente, registra un retraso superior a un año y medio en la tramitación de expedientes necesarios para obtener diferentes permisos.
Como por ejemplo, permisos para hacer pozos que regarán frutas y verduras que posteriormente nos alimentarán, permisos para sacar adelante promociones de vivienda social para intentar hacer frente a los elevados precios de los alquileres, permisos para poder hacer una reforma y que a su vez, dará empleo a carpinteros, obreros y fontaneros, entre otros.
La queja de la parálisis de la Administración es casi unánime en la sociedad. El problema no surgió ayer, un año y medio da para mucho. ¿Soluciones posibles? Los que conocen y sufren la situación han puesto sobre la mesa diferentes opciones.
Soluciones tan simples como poner más personal o facilitar la tramitación de determinados casos, más sencillos, haría que el departamento de Recursos Hídricos no se viera tan saturado. Pero las soluciones no llegan y, si se intentan, la burocracia los hace eternos.