Así lo ha expresado en declaraciones a los medios antes de participar en la jornada 'Superación, una calidad que nos iguala', organizada por la asociación de personas extuteladas Apeib y que se celebra este jueves en el Centro Flassaders.
"Tenemos que revisar los centros, los protocolos, los tipos de procesos terapéuticos pero todos los esfuerzos tienen que centrarse en quién detecta, cómo detecta y quien hace que estén explotadas sexualmente", ha argumentado la consellera.
Asimismo, en relación a su comparecencia en el Parlament el próximo martes, Santiago ha recordado que "no hablará de temas que no son competencia suya", sino que "solo hablará de sus centros".
El director de la Oficina Balear de la Infancia y la Adolescencia (OBIA), Serafín Carballo, ha añadido, por su parte, que en estos momentos "hay mucho trabajo por hacer" en el sentido de "revisar qué cosas pueden mejorarse" desde las instituciones.
"No hemos sabido proteger a los jóvenes que no se dejan proteger", ha reconocido Carballo, añadiendo que "toca espabilar" y "buscar soluciones". En relación a medidas concretas, ha propuesto mejorar la coordinación y monitorización entre los agentes implicados y considerar los casos de niñas "escabullidas" como "situaciones de alto riesgo".
Asimismo, preguntado por si podría haber más casos, además de los 16 que puso en conocimiento el IMAS, ha respondido que "habrá que esperarse a que termine la investigación" pero ha avisado de que "estas situaciones son contagiosas, ya que "una niña puede tirar de otra". "Habrá que esperar para poder determinar si realmente hay más casos", ha reiterado.
En relación al nuevo centro de acogida residencial especializado en casos de menores víctimas de prostitución, integrado por un equipo de atención especializada, Carballo ha considerado que "debería de utilizarse solo cuando la situación está fuera de control".
Por otro lado, el presidente de la Apeib, Juan Carlos López, ha reconocido que "les entristecen" las últimas informaciones que han salido publicadas, si bien ha pedido que "no se generalice a todo el colectivo".
Este tema saltó al debate público a raíz de una violación grupal a una menor tutelada por el IMAS, entidad dependiente del Consell de Mallorca. La agresión sexual se cometió, según fuentes cercanas al caso, en un piso del Camp Redó, en Palma, la pasada Nochebuena. Fueron detenidos siete varones (seis menores y un adulto) y una chica, también menor, que supuestamente habría actuado como enlace y forzado a la víctima a permanecer en la casa.