Ya fuera del consistorio, a media mañana, las calles se llenan de gente. La mayoría lleva la camiseta identificativa de la fiesta de Sant Antoni. Uno de los lugares que más gente concentra para ver bailar los dimonis alrededor de Sant Antoni es delante del Ajuntament.
Pocos minutos antes de las 14.30 horas, está abarrotado de gente. De hecho, algunos llevan en la calle desde las 10.00 horas para tener un buen sitio y no perderse nada.
Tan solo un pasadizo estrecho para dejar pasar la comitiva santantoniera: los músicos, los dimonis, Sant Antoni y el baciner, justo delante del portal, haciendo un círculo para los bailes. Como marca la tradición, tras el baile, la comitiva ha subido a la sala de actos del consistorio manacorí donde han vuelto a bailar. Con todo, en este día, todo el protagonismo se lo lleva el dimoni gros de Manacor.
Tras la recepción oficial, los dimonis han saludado a la gran cantidad de gente que esperaba para ver la danza que en Manacor es sinónimo de sentimiento y fiesta grande.
Centenares de personas, por no decir miles, no han querido perderse esta gran fiesta, por lo que abrirse paso entre la gente era difícil pero forma parte de la fiesta. Las celebraciones siguen alrededor de las hogueras.