Este jueves, en los controles que se llevan a cabo a los buques que arriban al puerto de Alcúdia por parte de la Guardia Civil, en el que participaban agentes de EDOA y del mismo puerto, apoyados por un agente del Servicio Cinológico con un perro especialista en detección de drogas, procedieron al registro de un vehículo al que había marcado el can como positivo.
En un primer registro no se halló nada en el interior, pero ante la insistencia del perro se procedió a un registro más profundo, en el que se descubrieron 4 kilos de cocaína ocultos en un doble fondo del vehículo.
Se está a la espera de los datos que se puedan obtener sobre la procedencia y el destino de la droga, que de momento se desconocen.
Por otro lado agentes de la Guardia Civil de Calvià iniciaron una investigación, al tener conocimiento de que una persona se dedicaba a la distribución de drogas de diseño en locales de ocio de la citada localidad.
Como resultado de la misma se logró identificar al autor y tras una serie de vigilancias se le detuvo mientras realizaba una venta de estas sustancias, momento en el cual le fueron aprendidas ochenta (80) comprimidos de éxtasis, además unos doscientos (200) euros en efectivo y un terminal móvil de última generación, además de una motocicleta con la que el detenido se desplazaba habitualmente.
Posteriormente y tras la práctica de un registro en su domicilio, sito en la localidad de Palma, le fueron intervenidas cuarenta (40) comprimidos más de éxtasis, diez de (10) de cristal (MDMA), una báscula de precisión, útiles para la confección de dosis, y quinientos (500) euros en metálico.