Alba, que participó en la mesa redonda sobre Descarbonización en las islas celebrada en la cumbre de la COP junto a representantes de la Comisión Europea, de los Gobiernos de Canarias y Baleares, el Consell de Menorca y el ministerio de Transición Ecológica, admitió que los desafíos para lograr el objetivo de descarbonización total en Canarias para 2040 son evidentes.En la actualidad, la cuota de energías renovables en las islas es tan sólo del 6% en un sistema energéticamente aislado y con una dependencia energética del 98% que se cubre, casi en su totalidad, con energías fósiles.
Para adelantar una década la descarbonización del archipiélago respecto a los objetivos generales de la UE y conseguir que las emisiones del sector energético se reduzcan a cero para 2040, Alba destacó que habrá que realizar una apuesta decidida por las renovables con la instalación de 10.000 Mw al año, de los que cerca de 1.000 Mw serán de autonconsumo, cifras que contrastan con los 600Mw instalados en la actualidad.
La nueva capacidad renovable deberá acompañarse de la instalación de baterías para cubrir la demanda en las horas sin sol o sin viento. No obstante, el director de Regulación de Endesa apuntó que las baterías no solucionan todos los problemas, ya que se se saturan cuando tienen que almacenar energía durante largos periodos. Por ejemplo, en invierno, con menos horas de sol y viento, no pueden cubrir toda la energía que deja de producirse en los parques eólicos y solares.
Una solución sería utilizar el excedente de producción renovable no almacenado en las baterías para producir hidrógeno destinado a las plantas de generación térmica que, de esta forma, podrán generar electricidad sin emisiones. Alba apuntó que la tecnología del hidrógeno molecular está todavía en fase de maduración por lo que, durante el periodo de transición, las centrales de ciclo combinado deberán sustituir el fuel y el gasoil por gas, con menos emisiones.
El plan, según admitió Alba, necesitará para ponerse en marcha grandes inversiones que alcanzan los 7.000 millones de euros para el despliegue de las renovables, 1.500 millones para el desarrollo de sistemas de almacenamiento de baterías y 450 millones para el paso a gas de las centrales durante el periodo transitorio.
Por lo que respecta al transporte por carretera, la solución llega con el vehículo eléctrico. El objetivo para alcanzar la meta de descarbonización es llegar al millón de vehículos eléctricos en Canarias para 2040, a un ritmo de 40.000 vehículos anuales.Para alcanzar estas cifras deberá acometerse un plan de despliegue de puntos de recarga públicos y en las viviendas y un plan de incentivos urgentes a la compra de vehículos eléctricos.
En el caso de la industria canaria, para que sea libre de emisiones en 2040 será necesario apostar por la electrificación y el uso del hidrógeno. Alba destacó que Las nuevas soluciones tecnológicas que llegarán en un futuro próximo serán también claves para la adaptación del transporte aéreo y marítimo, desde aviones eléctricos a buques con pilas de combustible de hidrógeno.En el caso de los hogares, la electrificación, el autoconsumo y la energía termosolar marcarán el futuro.
El Consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, José Antonio Valbuena, destacó la ambición del proyecto y expresó el apoyo del ejecutivo canario a todas las iniciativas qe permitan acelerar la descarbonización en las islas.